Estás sentado frente a la
pc
con las ventanas bien
cerradas por el frío,
lejos de tus amigos
europeos,
lejos del mar.
Es pura noche ya.
El vecindario fue a
dormir,
mientras tú sigues
inclinado sobre la pantalla
buscando presentir la derrota
del tedio.
Vagabundeas por las
manchas
de las paredes
desgastadas,
y luego te diriges hacia
la esquina de tu ser,
para observar los últimos vestigios
para observar los últimos vestigios
de tu aptitud que empieza
a devastarse.
Mucho tiempo has vivido en este hogar,
con su jardín pequeño y
su enramada,
donde la vida se prolonga en torno a ti,
y las aves y el cielo más que nunca te pertenecen.
donde la vida se prolonga en torno a ti,
y las aves y el cielo más que nunca te pertenecen.
Mas, como siempre, a
nadie tienes esta noche
para beber contigo,
para vencer la niebla, los oscuros abismos.
Sigues buscando el éxtasis
para vencer la niebla, los oscuros abismos.
Sigues buscando el éxtasis
en el lugar equivocado.
Retráctate, no tienes
mucho tiempo.
La noche empieza su agonía
y sigue siendo tácita tu soledad.
La noche empieza su agonía
y sigue siendo tácita tu soledad.