domingo, 17 de noviembre de 2019

Rodearse de desiertos

Al estar rodeado de desiertos
porque he hallado un buen oasis,
el ímpetu del sol puede escaldar lo que desee
pues los buitres esperarán en vano.

En el espejo de la fuente
asomará la luna en la lánguida noche,
y surgirán cantándome los grillos
sus tenaces monodias de esperanza.

Luego, para enfrentar el desierto infinito,
puedo hacerme reptil de sangre fría,
y adaptarme a su quemante suelo
levantando las patas alternativamente.