sábado, 1 de octubre de 2016

Noche de pasión desnuda

¡Qué noche aquella de pasión desnuda!
Selene descubría, generosa,
la piel tostada, la inquietud boscosa
del mudo pubis, la belleza muda.

¡Cuánta lascivia y ansiedad aguda!
Jardín nocturno de pagana diosa,
aliento ávido de culmen rosa
floreciente; efusión viril, tozuda.

Noche sublime —indómita viajera—
recogiendo en su cántaro de olvido,
hacia el albor, la eternidad amante.

Púrpura alondra  —exhumada esfera—.
En este otoño de arruinado nido
disipa en el adiós su vuelo errante.